domingo, 14 de abril de 2013

Cospedal y su idea del nazismo y los escraches


DE COSPEDAL: "El escrache es nazismo, es fascismo, me recuerda a los años previos al 36".

Se queja la señora, de que los escraches es violentar el voto, ataques a las familias y a sus domicilios... un estilo totalitario. No es a las familias, es a vosotros, directamente, tal vez los escraches puedan parecer, como decirlo, bestiales, por el hecho de que todo el mundo tiene derecho a la intimidad en su domicilio, pero ya que en el congreso no nos hacéis ni puñetero caso, pues a vuestras casas habrá que ir a ver si os dais cuenta del cabreo que tienen los españoles.

Tachar los escraches de nazismo me parece la barbaridad mas fuerte desde aquello que dijo el ministro del interior de que los matrimonios gays ponian en peligro la continuidad de la especie humana. Al margen de la ignorancia histórica de esta gente, a mi la situación también me recuerda al 36 y los momentos posteriores, en los que el generalísimo censuraba la libertad de expresión. Esta tipa tacha los escraches (manifestaciones en la puerta del domicilio de aquel político contra el que se quiere denunciar) de nazismo, cuando ellos son los primeros que, cubiertos de mierda hasta el cuello, intentar evitar que les metan un puro. Ese el ejemplo de las recientes limitaciones decretadas por el gobierno de la actividad de detectives (que casualidad que lo hayan hecho cuando han empezado a investigarles a ellos). Ellos son los auténticos granujas, personas sin escrúpulos que se cuelgan medallitas porque la situacion de España mejorará en 2014, ahogándonos cada vez más y poniéndonos un futuro negro, muy negro. A mi cada vez me da más vergüenza este país, y esto tarde o temprano va a explotar, y no lo digo yo, lo dice la historia con las revoluciones del siglo XVIII, las huelgas y manifestaciones del siglo XX, todas ellas iniciadas por un pueblo que, y perdonad la expresión, estaba hasta los mismísimos cojones.

jueves, 9 de febrero de 2012

LA NUEVA ERA, que por ser nueva, no quiere decir que sea buena

Todos nosotros conocemos la historia de Terminator. La rebelión de las máquinas, el Juicio Final en el que las máquinas mandan sobre los humanos. Esta historia se supone que ocurre en la década del 2030. Sin embargo, ya está ocurriendo ahora, en pleno 2011. No son robots, pero poco les falta. Son las Black Berrys y los iPhone, maquinita que con sus super tarifas planas dejan a sus dueños embobados y pendientes las 24 horas del dia de si les llegan mesajes al tuenti, facebook, twitter, y demás redes sociales.

¿En serio nadie se desquicia cuando intentas hablar con alguien y cada dos por tres te interrumpe para mirar los mensajitos en la "BB"? Luego tenemos las nuevas generaciones de niños, los nacidos en el "nuevo milenio", cuyos padres no tienen mejores ocurrencias que comprarle una BlackBerry al niño con 10 años. ¿En qué piensan señores? Dele una máquina de esas al niño y pasará de tener un hijo a tener un mueble, porque hablará y se moverá lo mismo que el sofá de casa, se comunicará lo mismo que su difunto tatarabuelo, y de hacerlo, lo hará via Whatssap.

La nueva era que nos espera a mi, personalmente, no me asusta, me acojona. Niñas de 11 años haciendose fotos con la tripa al aire, poniendolas en blanco y negro, y escribiendo en fucsia "SaAaH XuLaKikAaAah mOreNikAHh"; niños de 10 años con piercings en la boca y hablando como canis... y por supuesto subiendo sus "fotacas" al tuenti, cuando se supone que ningún menor de 14 años puede hacerse. Si son asi con 10 años, ¿como serán con 18? Yo, como futuro profesor, ¿qué clase de alumnos voy a tener? Si la genética me tiene condenado a quedarme calvo, está claro que me quedaré antes de hora, y lo mismo va para mis compañeros de universidad.

Al capricho de las tecnologias y al trauma de los niños que estando aún en el colegio parecen canis veinteañeros, se le suman los recortes en educación y sanidad del gobierno, el paro y Dios sabe las cosas que están por venir. Señoras y señores, dicen que el fin del mundo llegará en diciembre de 2012. Dudo mucho que sea por un cataclismo natural, pero seguro que se acaba en esa fecha tal y como esta la vida ahora. Los mayas no andaban desencaminados al fin y al cabo...